viernes, 14 de octubre de 2011

Canto 5; "Volátil ave, sonoro mosquito"

Iba caminando, con las manos un poco arqueadas, como sosteniendo pequeñas pelotas, pero en realidad no tenía absolutamente nada. Sentía un leve hormigueo en mis manos, y también las sentía calientes, un poco raras, pero eran mis manos. Con estas dos herramientas de creatividad hacía volar mi mente, construía movimientos de papel, creaba ciclos de impresión, en fin eran mis manos y yo las controlaba. Las usaba para impresionar y para acariciar, para defender o para obrar, tenía manos, tenía años en mí haciendo cosas con ellas, tenían experiencia, tenía, tuve y tengo estas cubiertas del azul de inspiración, mojadas con el agua de la pureza, y con la pureza del fluido. Un poco empapadas de paz, un poco llenas de ideas y cosas por hacer, un tanto más de calor proveniente de la energía divina y bastante más, de sangre y oxígeno corriendo a través de mis venas.
Con estos útiles implementos, creo sentimientos y formo sonrisas, con manos de piedra o con manos de tela, toco corazones y abro puertas con la música, así como hasta las más rústicas aves hablan y penetran en el cerebro. Estas que tengo acá, son las que uso para expresarme, estas de aquí son las que se esconden en bolsillos, esta y aquella son las mías, tú y tú también. Con la siniestra escribo y con la siniestra tomo la sopa, a diestras golpeo y dirijo el galopeo, pero con ambas hago galopas seguidas de negritas, con la siniestra resuelvo y con la diestra me rasco. Pero aún así cuando me rasco las dos manos me siguen picando, ¿Por qué me pican tanto? Estos mosquitos están un poco violentos parece, medios sádicos, pican y pican y destruyen, rompen árboles, los cortan por la mitad y los queman, yo me pregunto cuál es la razón. Ahora hay muchos mosquitos, hay mosquitos americanos, otros en los polos, unos al este otros al oeste, en fin todos son mosquitos. Unos vuelan y pican menos que otros, pican más rápido que otros, pican y pican ¡ay! De mí los mosquitos como pican, los picantes mosquitos. Vuelan y vuelan los mosquitos, aletean y aletean tras impedimentos, pero nadie escucha sus alas, debe ser por que ya rompieron hasta su alas, tan destructores que hasta se quiebran ellos mismos, toman y toman rumbos y rumbos, dejan y toman, pican y vuelan, pero ¡demonios que pican! Ahondan en el estiércol, como las hormigas en el alimento y como los hipopótamos en el lodo. Son pegotes y picantes, ordinarios, tan comunes que se salen de lo normal, se escapan del sentido común. Miren a su alrededor, fíjense, hay varios insectos, tantos que faltan dedos en la mano y en los pies para contarlos. Llegan a hacer tanto ruido que estresan al unísono con sus aleteos por doquier, se trasladan como hormigas pero parece que no son tan inteligentes ni fuertes como este animalito, son un poco inconscientes, a veces concientes, pero sólo a veces, cuando se dan cuenta que todo esta hecho y cuando el pan ya está cocinado. Simplemente mosquitos picantes y ordinarios que no pueden ni siquiera cocinar un huevo, porque todo lo arruinan, no piensan solo aletean y actúan, y como pican los picantes, como aletean los comunes insectos, como comen los comilones comensales a la espera del acto y el error. También hay unos mosquitos especiales, que son de otra raza, más bien de otro planeta porque no les gusta comer y no les agrada lo mas delicioso, pareciera que son entes de otra dimensión que no necesitan de comida y agua para vivir, al parecer son sólo microorganismos, no les agrada lo rico, y aletean al ver una rica comida, no le dan paso a la delicia y lloran y como pican y aletean. Podría describir varios tipos, varios insectos y hasta abejas, pero es cosa de escuchar el vuelo y el aleteo, que no son difíciles de captar, porque ¡cómo pican y aletean los mosquitos!

De esto me di cuenta hoy, cuando estaba sentado en mi sillón azul, de repente pasaron unos volando, los miré, tomé mi pluma y comencé a trazar líneas, hasta dibujarlos bien picantes y muy sonoros. Seguí sentado en mi sillón, escuchando a unos pajaritos que pasaron por fuera de mi hogar. Sonreí y me alegré, porque los sentí tan alegres, que me dieron esa bella sensación que cambia completamente rostros, mueve personas y atraviesa mares y distancias. Esa que hace hormiguear el corazón y que hace saltar a los más pesados, la que hace sonreír a niños huérfanos, desnutridos y pobres, esa que es la más pura y la más linda, la alegría.
Cuando pasaron las aves volando, a parte de alegrarme conseguí estar sereno y comencé a dibujar unos montes nevados y puntiagudos, unos picos naturales blancos como las nubes, un lago gigante coloreado de un turquesa muy bonito, y un verde esparcido por toda la hoja, tracé un conjunto de curvas y garabatos hasta que forme este precioso dibujo de mi tierra. Que más bonito que mi tierra, mi linda tierra en donde vivo, la única parte en donde nieva y hay un sol que te calienta la frente al mismo tiempo. Ojalá dibujara y escribiera tanto mosquitos como paisajes todos los días y todos los días lo leyeran todas las personas del mundo y lo entendieran, para que de una vez por todas los mosquitos no sean los que molestan, para que en un santiamén cambien los mosquitos, para que dejen de aletear violentamente como lo hacen día a día y vuelen como las aves. Esas aves que cantan de una manera única, esas bellas vidas que no tienen manos, pero tienen alas, y llegan más lejos que cualquier persona que use las dos manos. Así mismo un día todos volemos en la misma sintonía y en la misma vibración, así de lindo como lo hacen las aves, así de rápido y fluidamente como planean los gorriones, así de fugaces como las estrellas que se encuentran en el universo, así de universales como todos podemos ser y como todos podemos volar. Con una mano, o con la otra, con una pierna o sin ninguna, teniendo conciencia y teniendo amor, porque no hace falta ni una mano ni un dedo, para usar nuestras alas y volar junto a los gorriones, loicas, zorzales entre otros seres de la naturaleza, dignos de respirar y volar todos al mismo tiempo. No hay impedimento alguno, ni motivo, para flaquear y sonreír ante los problemas y vaivenes de la vida, no hay nadie que no pueda emprender vuelo sonriendo, no hay ave que no pueda volar mientras tenga sus bellas alas.

“Vuelo pintado de gris, camino trazado como una directriz”

Estaba tirado sintiendo hormigueos, despierto y relajado. Comencé a soñar, llegué a una estructura grande, religiosa, bastante lujosa e impresionante. Era un palacio en donde se encontraba un conocido personaje, de repente aparecía al lado mío, rato después aparecía un caballo frente a mí y se sentaba en su cola, haciéndome saber el poder que había dentro de estas cuatro grandes paredes. Otras veces miraba el techo y encontraba lámparas totalmente lujosas y nunca antes vistas por mis retinas, otras veces sentía inseguridad, incertidumbre de qué era lo que estaba experimentando en ese momento.

Fuese como fuese esta bizarra experiencia me fue impactante, noté estímulos de gran calibre en el momento, sensaciones profundas acerca del origen de lo que estaba pasando. Le pregunté qué era lo que pasaba a este caballero de pelo largo (medio barbudo), y no se cómo lo hizo, pero me mostró unas imágenes en mi cabeza, como si su lenguaje fuera un correr rápido de imágenes mentales y de infinidades de letras, frases, y libros.

Vi unas cuantas letras, y palabras pero no tenían concordancia alguna, eran sólo conceptos sin muletillas que den sentido, algo se entendía pero era un lenguaje un poco raro. Entonces me dije; son palabras sin sentido, no les tomo importancia y no influyen en mi, las vi porque son parte de algo que no está en mis esquemas y no las comprendo, o simplemente son espejismos de algunos pensamientos cotidianos que ahondan en mi mente. Al otro día, me desperté impresionado del sueño impactante que tuve la noche anterior, pero aun así me levante rápido, cuando abrí los ojos cambió mi pensamiento, me desplacé por mi ciudad rapidísimo y disfrute del vivir nuevamente.

Era un día húmedo, como la lluvia cayendo en una casa hogareña brindadora de unos cuantos mates y calor. Día gris, pero día aprovechable como todos, día gris y día bello. Lo aproveché, pasé sobre el agua color café chaleco de lana y me embarré, pero lo hice por tratar de encontrar a un animal tan bello como una estrella. Era un perro color beige, tenía una cola larga y grande, bastante loca. Era una perra que aterra de su locura. Por lo mismo me causaba mucha simpatía, hacía que la viera y sonriera de forma instantánea. Lamentablemente se perdió y ahora no está, se siente el vacío de las impresiones y sensaciones que dejó.

Crudamente, ahora conozco y sé que cuando uno no tiene a la mano las cosas, animales, personas o ciertos elementos los añora mucho más. Es como si repentinamente aprendieras a querer y a apreciar lo que tuviste, a valorarlo y amarlo con tal sentimiento que nunca antes se podría haber imaginado.

Es entonces cuando empiezas a valorar cada momento de tu vida, ante pérdidas repentinas que tocan y provocan tu emoción, moviendo tu mente a diferentes pensamientos e ideas y trasladando el corazón hacia los recuerdos y crudas memorias. Hasta te pones en situaciones en las que estabas al lado de él o ella, escuchas esas conversaciones viejas, pero no son al cien por ciento reales, son recuerdos y huellas de lo que el mundo va dejando a través del tiempo.

Por otro lado, los acontecimientos vividos en la imaginación vuelan, tocan la puerta del sentimiento puro, y te tocan a ti también directamente en el cerebro. Toca que te toca a la puerta, dice la emoción en una canción. La ventana te susurra al oído que des unos pasos mirando hacia el cielo y avances unos cuantos más. Algunas veces se oyen estos susurros pero no se escuchan con el oído comprensivo, no se le prestan atención a los fonemas de dicha ventana, se recae en el mismo lugar, o simplemente retrocedes unos cuantos pasos.

En fin, la ventana y otras cosas me dicen que la clave es trazar el camino y abordarlo de manera feliz, positiva y optimista, escuchar a la ventana, o quizás también al tragaluz, o al tragaluz en la noche, sintiendo los sonidos más oscuros, tenebrosos y peligrosos rugidos de osos sonoros. Se escucha, se oye y se comprende, que los pasos se dan para atrás y para adelante prestando atención tanto al pasado como presente. Pero se siente que la ventana y otras llamadas ranas dicen; céntrate en el ahora, mira hacia atrás y extrae los buenos recuerdos, aprende de los malos y realiza pasos seguros rumbo hacia delante, ya que es fácil chocar hasta con un estante al instante.

¿Con quién tengo el gusto?

Hoy y ayer llovió fuerte, mi rabia hizo sacudir el mar. (Dijo Poseidón).
Comía nuez y reposaba mi trasero en una especie de cama grande. Leía a un vago, pero sagaz cantor. Más específicamente el siguiente fragmento; "se tocará la puerta de la impresión y la atención ¿quién responderá al frontis, el que quiere contestar o el que no lo quiere así?"
Escuche unos tacos muy fuertes sonando hacia mi puerta. Mi tía llega a mi casa. Tocan la puerta, ¿quién es?
-Minerva, dice entonada.
Relacioné tacos rápidos, y sonido agresivo hacia el superior de la puerta. Dije es ella. Por supuesto, abrí la puerta.
Escucho: ¡¡¡Hijo!!! ¡No sabes lo que sucedió!
-Pensé la hiedra se secó. ¿Con esta lluvia?
Me decía que este no era el momento ni la situación adecuada para decirme la noticia (luego de mirarme con nerviosismo patológico). Le dije no escondas nada.
Ella pronuncia: tu tío murió.
-No, no. ¡NO! No puede ser verdad, mi tío es como un arrayán. Esto es mentira, dije yo. No puede ser. (Luego de una mirada fría, apática más bien)
Caí al suelo de rodillas, como un caballero de piel rosada, ante el rey comunicador.
Momentos más tarde, la nieve hecha piedras voló hacia mis oídos y frente. Antes de que me dé cuenta de que todo era verdad, la dama desencarnada me abraza, ahí en la nieve gris. Sí, en el piso de mi hogar.
Mis lágrimas se adueñaban de su cabello bello como Helena, mientras me frotaba la espalda muy fuerte. Entendí que el tiempo no volvería atrás jamás.
Ahora sería en parte un dibujo, un vago recuerdo, el té con mi tío, lo más simple.
Anda a dormir mientras te preparo una hierba, me decía ella.
Le respondí: No quiero más hierbas, ni hiedras.
Yo pensaba cómo iba a poder dormir, cómo comería, cómo respiraría luego del rayo de Zeus. Cómo, además de estar atrapado en un corral. Con crudos caballos como rayos, y el feo Morfeo.
Me llegó al hueso, como esas puntadas dentro de ti, luego de un vaso refrescante con alfileres rojos. Tan filoso como un cuchillo, me punzó el corazón, ella. La vívida, muerta y real noticia infame.
No me di cuenta, y me quedé dormido encima de mi escritorio, con la cabeza encima de mi brazo derecho.
Al otro día, claro, cuando me desperté, tenía a un débil y doloroso amigo que sostenía mi cabeza. También el brazo dormidísimo. Dije esto no puede ser, por enésima vez.
Me comuniqué con él, al instante.
Cronos se aparece en dos movimientos, pasa el caballero tiempo.
Contesta la agonía, acompañada de la tristeza, cubierta de una piel dicen rosada.
¿Con quién tengo el gusto? ¿Con el placer?
-No, con el miedo, el dueño de tu sueño.

Mamá diles que sientan

Después de estar varios días postrado en mi lecho, puedo sentir mis piernas. ¡Qué alegría más grande!, puedo caminar. En un momento la ese de sonrisa voló por los aires, se hizo viento, y el viento se hizo brisa, tan alegre, tan alegre, que pude respirar perfectamente bien y muy tranquilo, hasta los nuevos días. Días nuevos, días bellos, días de sol y lluvia, lluvia alegre y atractiva, agua que llega al cuerpo y lo purifica, te empapa de alegría pura. Estoy aquí, ahora en un bosque verde, de múltiples árboles, y pocas rocas, en un bosque, en una arboleda de paz. ¿Lo han sentido? Pocas personas, creo yo. Yo podría decir que soy un afortunado, puedo disfrutar y más ahora. Nuevamente con el tacto de mis piernas, aprecio lo que es atravesar un bosque verde como una manzana, tengo la dicha y la alegría de poder decir que he respirado un rico aire, en medio de grupos de manzanas vírgenes, en bosques en donde sólo existe la paz y sabiduría del oxígeno. ¡Qué más bello que lo bello! ¡Qué más puro que el aire obsequiado por las plantas y los árboles de la madre tierra!

Madre tierra, tantas sonrisas que das a infinidades de personas, y madre humana, tantos hijos que brindas, pero tanta destrucción que ejecutan ellos. Madre OH bella madre, ¿madre del conflicto?

Eres muy pura y bella OH bella madre, pero por ti es que ocurre todo, por tus frutos, y tu herencia, los más desdichados sufren y los más afortunados disfrutan de ti así como de la vida, ¡OH madre del conflicto!

OH madre, tienes hijos negros, también blancos y amarillos, verdes con hojas también, grises y duros, blancos y transparentes también. En fin, varía la música, los besos, el amor y el odio, las miradas, el dinero, la belleza, el agua, ¡todo! Todo está en constante cambio, entonces, si se fluctúa tanto ¡dime el porqué de cambios tan bruscos!, ¿son adoptados tus hijos? ¿Hay sólo un descendiente?
Si fuera así no dependería del género, sino de la fuerza del cambio, el instinto de lo distinto versus lo igual, y el grado de diferencia que ocurre entre estos, y entre ciertos momentos, ambientes, sentimientos, sensaciones, objetos, cosas vagas, ¡pero elementales!

Un día una niña llora, porque no tiene a su madre cerca, porque está en medio de un terremoto, tiene hambre, frío, pena, y no es capaz de moverse por sí sola en medio de un desastre ¿Qué hace? Cambia para estar bien, como estaba antes ¿Y si nunca estuvo bien? Entonces hay un motivo detrás, una causa antes del efecto, un huevo antes que una gallina, ¿o una gallina antes que el huevo? Efecto ante motivo, problema después de solución ¿o solución para tener más problemas solucionables?
Billones de dudas puedo plantear, como también lo hizo Buda, pero esto queda en merced de cada mentor y cada ente pensante, que le dará un sentido y una forma, una estructura compuesta por partes, una idea que formará un concepto, y en futuro una palabra hecha papel.
Sí, yo, Loica sigo filosofando, así como las madres siguen procreando, así como la madre tierra sigue creciendo y creciendo, así como la madre del conflicto, provoca incendios, derrumbes, muertes y hambrunas, así como todo cambia y fluctúa. Como todo mirado desde un cierto lado, causa una vaga impresión. Como desde arriba es a abajo o izquierda como es a derecha, como se puede formar algo grande y estruendoso, algo atendible e importante, como también algo realmente preocupante y sin cesar.
Por favor madre del conflicto detén tus fuerzas, OH madre tierra vence y sana mentes, terremotos, desastres y haz nacer nuevas manzanas verdes para un nuevo oxígeno, madre humana danos buenos hijos, que los que están son faltos del verbo sentir y faltos de sentido común, hazlos sentir por favor, diles que cambien.

Del corazón

Cómo revivir aquellos bellos momentos en los que todos en algun momento eran uno en mi, como volver hacia atras y sentir la ilusion de cariño temporal, como saber si fue torpeza o cariño, como saber si volvere a tener lo que tuve, como tener algo que nunca tuve y que los mas minimos indicios de acercamiento fueron evadidos y corridos de la faz de mi ser, como recuperar segundos en el fluir constante, como recordar esas pesas centesimas de esas mismas, como una foto o como un acto vívido, cómo? como saber si hay algo de union en lo que fue matiz y produjo frutos tan diversos, como repudiar a las mas minimas gotas de lluvia acida, teniendo en cuenta que es natural para el arbol mojarse y ser mojado, como encontrarme con lo que realmente fui, como no escuchar a los que dicen saber entender, si los mimos simios son los que se jactan de ellos mismos y no se respetan, como nadar entre el mar de boyas coloridas, si hasta la misma agua no se ve, como responder a lo irrespondible, cuando la respuesta es el pensamiento incontrolable.

Entre las nubes

Sentado, también parado, corriendo, trotando, volando, soñando, recorriendo, tocando, oliendo, escuchando y oyendo me concentro en mi respiración. Me entumezco de una paz blanca como las nubes y suave como la yema de los dedos de Buda. Comienzo a volar rápidamente despegando mis pies desde el suelo rocoso. Ahora estoy en el cielo escuchando cantos de aves y hasta de ángeles, pero otras veces en el cruel infierno, aferrado a un sádico y puntiagudo tridente de pecados y de furia, corrompido por el rápido pestañar y el sin pensar doy paso a la maldad sin querer hacerlo. Pero esto no me ocurre casi nunca, pienso que ocurre más veces en los sagaces de impaciencia y en los impulsivos, que en los pensativos y pasivos. Al escuchar la caída de unas cuantas estalactitas pienso en su velocidad, también que si cae y si se quiebra, puede ser positivo o negativo, blanco y negro a la vez, extremidades de polos tajantes, que no otorgan piedad alguna a los errores. Te equivocas y no te das cuenta, o te das cuenta más tarde cuando los blancos osos ya invernaron, o cuando una simple gota de agua comenzó en la cúspide y terminó en el Pacífico.
Fugaz brillo que das por leves momentos la alegría de saltar más allá de la estratósfera y gritar por doquier, ¡dame más visión de alegría para brindársela a quienes son necios, vacuos de pasividad y comprensión de los actos! ¿Dame un poco de tu luz? ¡Gracias!
Sospeché que pasó una estrella fugaz frente a mi entrecejo.
Sonreí como un bebé a los dos meses, vacilé como una almeja ante un toque, me trabé como un tartamudo epiléptico, lágrimas corrieron a través de mi mejilla mientras divisaba la fina manta de luz en la estrellada noche, comenzó a recorrer por mi psique el trote de acontecimientos dolorosos y amorosos, osados y estúpidos, alegres y sonrientes, fuertes e impresionantes, relajados y pasivos, rápidos y disléxicos, concretos y abstractos. Vi mi vida en un segundo y me dije a mí mismo: “ Por qué tanta crueldad y estupidez mientras otros sabotean sonrisas y recuerdos, por qué los fuertes maltratan a débiles, por qué sólo actúan y no piensan, o por qué otro piensan y después actúan, por qué existe este desequilibrio tan crudo y fuerte, que hace llorar a los más duros o sufrir a los más puros?
Extremadamente cuestionable, lamentablemente aprendido lentamente, tras muertes, guerras y sinfines de mentiras estúpidas. ¡Nada! Netamente ilógico, pero es así como ocurre; unos tontos pero no tanto, otros inteligentes pero a la vez estúpidos emocionalmente, unos genios por ahí, otros vagabundos por aquí.
Por otro lado es viceversa y por el lado puede ser derecho, como puede ser ilógico o también anormal. Despiadados simplemente…

La gama de dolores

¿Y por qué dice el sabio, cuando todo lo pregunta?
Sagaz paz que truenas a través de los mares, te escondes como una lombriz en la tierra, corres como un auto, al tanto de tu muerte.
A ti te digo, ¡flojera de porquería!, que te alojas dentro de mis pensamientos. Refúgiate en mis brazos, apoya tu cabeza, que por mientras sueño.
Algo así como un trabalenguas traba mi ventana, como una lengua de perro buscando su cola, como una dama desencarnada, sintiendo su brazo largo y aburrido mientras ésta estalla.
Este es uno de los fomes no tan buenos, es uno de los buenos no tan malos, es uno igual. Se une con unas cuantas palabras mientras estornudo. Se une la tierra con el cemento, como el nervio con un tartamudo. Terminé, hasta medio lento he dicho. Nos vemos en un nicho, he dicho raro bicho.

He de ser hoy


Hacia altos tonos del corazón.
De color de arcilla,
fijado en las torres
de la escala mágica.
Cuando se cierra el paso a la inmensidad.
Se abrió una puerta;
Del temor hacia las tinieblas.
Fue en aquél entonces...
Permanente para el ahora.
Ahí.
Encima del calentador ausente
Está el fuego de la espuma.
Como aquél dibujo,
Ese que imaginas ahora, el mejor.
El especial,
Ese tan bello, que lo fuiste manchando
Con barro y polvo
Ese tan rupestre, que lo fuiste marchitando
Allí, encima de la edad.
En el tiempo.
Así como la lentitud.
Así es,
Es Así.
Inolvidable.
A veces se nubla,
Otras ciega tu mancha.
¿Ahora ves tú el pasado?
¿Lo tocas?
¿Por qué no lo recuerdas?
Es así
El fiel silbido del tiempo,
que corre como un falso felino,
entre los chasquidos de las olas.
Con aquellas bellas,
De monte a lo llano, de faz a paz geográfica.
Entre las conchas.
Por los hoyos de la risa
y a través de las lengas.
Esta es esa pena,
La barba de la lengua verde,
Lo efímero del término,
De la risa.
Está ella,
Allí,
La ajena,
El viento.
Detrás del edificio de la vida,
nadando con los gallos.
Con la orca de los peces.
Con el gran,
Con tus piedras
Con el pasto marcado de arrugas,
Con la danza de las rocas,
Con la dimensión de la poderosa rosa blanca.
Es la voz de la muerte; el cuero.
Es el rústico olor de la muerte; la vida muerta,
Hecha bella.
Sólo para los talladores de la lana,
Para los lectores de las piedras.
Para la mano junto a su traición,
Para el que sabroso brebaje es,
Cuando sagaz artesano de afectos sois.
Morir viviendo,
vivir muriendo entre lo bello,
Por esta brecha,
Por el patagónico coirón,
Por el viento asmático.
Y por las flechas del ser,
He de ser hoy.

Trencito

Ella no sabe lo que quiere, se compra cosas y no le gustan.
Baja de peso en dos semanas.
No le gustó, porque bajó mucho y su ropa le queda suelta.
Vuelve a recuperar su peso en un breve tiempo.
Pararse ante el closet es un suplicio para ella, no sabe qué prenda tomar.
Encuentra ropa vieja, que no sabía donde estaba. (Siempre la buscó y nunca la pudo encontrar)
Se junta con su mejor amiga, esta le trae el espejo que dejó en su casa.
Van a comer.
Le dicen ¿qué sandwich desea? No sabe.
Huele un perfume muy rico, de hecho hasta llama su atención.
Mira hacia su izquierda.
Pasa "ella".
Le da rabia, pasa con la cartera que siempre quiso.
Vuelve a mirar su plato y sigue conversando con su amiga, pero mirando a "ella" intermitentemente, con las cejas levantadas.
Corta su sandwich con toda la ira del mundo.
LLega el moso, les dice: ¿desean algo más?
-No gracias.
Conversan sentadas, terminan de comer y empiezan a revisar el celular. Por mientras sacan el encrespador de pestañas.
Pasa el tiempo, se aburren, se van a la casa de una amiga. Esta les muestra su nuevo perfume, dice que un buen perfume "es algo muy importante".
Es el mismo de "ella", la de la cartera.
Lo huelen.
Una dice "ya no me gusta", con la guata llena, pero el corazón descontento.
Se pone a mirar televisión, porque le gustan los de piernas grandes. Se corta la luz.
¿Qué hacemos?
Se depilan. Horas y horas conversando.
Llama a su amiga, le dice que se apure.
Se va de la casa de su amiga, sola.
Toma colectivo, apurada.
El colectivero le empieza a hablar.
Ella asiente la cabeza y sonríe sin energía.
LLega a su casa, el papá le dice desde el living:"hola, te tengo pizza".
Ella va directo a su pieza.
La llaman, contesta y no le hablan, cortan.
No sabe que hacer.
Se dice a sí misma ¿Qué mierda?
La mamá, desde lejos le grita:"a comer"
Ella dice: puta la wea.
Están todos comiendo, todo bien, hasta que dice:"Se me acabó la plata del celular, y necesito plata para mis pastillas"
La mamá la mira con el seño fruncido, y le dice: ¿No te pasé plata ayer?
-Sí, pero es que...
-La mamá le da $10000
No se da cuenta, y se quema terriblemente en la mano.
Nuevamente: ¡puta la wea!
De repente, le llega un mensaje. Se inquieta, con los dedos manchados, quemada e incomoda. Busca su celular, mira el mensaje y dice:"Entel pcs te recuerda que tienes una semana para pagar tu presta-luca", de lo contrario..."
Mueve su cabeza, dice permiso.
Se va donde su otra amiga, llega atrasada. Dice que se vino caminando, porque no pudo cambiar el billete.
Su amiga le dice ya, vamos a la esquina.
Van a un local donde venden cigarros. Pregunta: ¿a cuanto están los trencito?
-No tenemos chocolates, tenemos papas fritas.
-Puta la wea... (titubea) Me da dos paquetes de papas fritas.
Se van.
(Comen ansiosamente)
Se dan cuenta que llegarán tarde a la previa, llaman por teléfono diciendo: "vamos saliendo".
LLegan al lugar, su amiga antes de entrar a la previa, se tropieza.
Le dice:"cuidado ahuevoná"

Vientito desolado

Escribamos entre uniones
a ver si logramos junto a ti,
este nexo social tan ficticio.
Expuesto en letritas engañosas,
vientos sagaces.

Digamos que es la oda al pencil

Luis felipe sandoval perez dice,
este lapiz regalado,
sobre mano izquierda
en cinta roja.
Desplazandose,
en arbol procesado.
Para mover las ideas,
locas.
Aberradas por la luz del mañana.

Cuadro

Me caigo de las ganas
de trazar rayas mas decentes
que una hojita de papel
escrita con los ojos
dados vueltas
hacia una recta inquebrantable.
No sé,
pero esTo justo cabe
en unos cubitos cuadraditos,
adoloridos versos ...

El día de Norman

Este era un vago que escribía desde una mirada totalmente particular. Se fijaba en detalles, más que en cosas centrales. Hoy piensa con el hemisferio derecho, pareciera que tiene un gusto autístico por los objetos sin mayor significado. Pareciera que tiene el mal de Diógenes, porque cada vez que camina, recoge todo lo que le llama la atención.

Obviamente sólo él se entiende dentro de su mal, ya que la mayoría de las personas no suelen hacer esta aberrante recogida de datos. Algunos normales pueden ser, si es que los llamamos artesanos, panaderos del arte moldeable. Si usan sus dedos y manos para entrelazar creatividad, ideas y alambres, piedras de la costa, o tipos de objetos no tan raros, como los que recoge este tipo de Diógenes. Loica no puede preguntar por qué no le responden cosas que quedan en su corteza cerebral dando vuelta todo el día, porque no habla. El cree que no lo entienden, porque mira otras perspectivas de las cosas. A veces se da cuenta de que está haciendo cosas tontas y mezclando ideas absurdas que no van al caso. Causan gran desconcierto, burlas y hasta risas despectivas. Como digo, se fija en los aspectos más inútiles y secundarios de las imágenes, videos, conversaciones y hasta canciones. En días afortunados logra pensar con su otro hemisferio, y mas racionalmente, analizando mucho más lógicamente las cosas y los impulsos que se le pronuncian en esta gran obra de teatro de los que se hacen y son idiotas. Según el está entre los idiotas que temporal y periódicamente se hacen los zorros. Parece que es una breve racha de salida cotidiana a su forma de pensar y actuar.

Entonces dos veces supo y entendió, que existían aparatos psíquicos que eran muy diferentes, que les costaba mucho entender las cosas de la manera normal, que él casi siempre estaba en un estado pseudo psicótico pensando y produciendo su mundo ficticio y propio, desconcentradamente elaborando imágenes. Se movía por las sensaciones, más que por la lógica y analítica escucha de contextos, memorizaba sonidos, expresiones, imitaciones de otros, hasta muecas que las interpretaba de una manera muy igual a los dueños y doñas. Unos días se preguntaba muchas cosas, y su mente andaba a mil por hora, mientras que otros días eran una cruda nube gris, llena de un monótono tema. Siempre busca cosas llamativas, ideas y situaciones que lo hagan viajar lo más próximo hacia una impresión. Digo una impresión perceptiva, no una hoja de papel, obviamente.

El proceder creativo y la relatividad

La noche de hoy es el día de mañana y el ayer de hoy ahora no existe. No obstante está presente un Sr. que hoy presiente el mañana. Se llama ojo sabio.

Se acaba de espumar el tiempo presente como una esponja que años absorviendo, se traduce en un cancionero con letras recitadas por arlequines, unos habilosos interpretes.

Estas traducciones van absorviendo energia que tragadas por payasos, atoran. 

Así, el lenguaje limita y el actor imita que no imita. Pero, no se limita a palabras.
Sobrepasa y no tirita. Interpreta y no cesa de representar mediante expresiones no verbales y simbólicas su proceder creativo. 

Y con la diestra te lo digo

Dibujo, pienso y aprendo
¿Sabes?
Me comunico conmigo,
¿tienes algún problema con eso?
Yo miro a los cielos,
respiro y digo
Dios! ¿Dónde estás hoy?
Antes te gritaba,
a vivas voces
que me ayudes.
Nunca me escuchaste al parecer,
pparece.
Puedo decir parece.
Hoy solo te digo gracias.
Nada más.
El mundo natural me basta,
si existes
es bueno.
Sino,
no importa.
Igual creo aparecerías,
de alguna forma.
Derivada.
He dicho no lo sé.

Rayada, desbordada pasión

Curvilíneo es este poema
digno de una clara labor analitica
en la mente de todo artista desolado,
olvidado en el ayer,
que alaba en las pampas despampanantes
del río de la inspiración.
Que estornuda
como un jeroglífico pies arriba
en un acuario terrestre.
He de ser hoy.
Dislexia,
en el ficticio aroma
de la pluma,
del que dibuja
un cuadrado con pasión.

Lo juro

Juro,
que esta es una libre asociación,
prometo,
que no lo es.
Siendo que estamos aferrados al mundo
y sus secuaces lobos dulces.

lunes, 12 de septiembre de 2011

Cantándole a Taita Dios (Milonga) - Evaristo Barrios

De curioso y arriesgao
una tarde de tormenta,
subí al cielo por mi cuenta,
en una nube sentao.
San Pedro salió enojao
cuando golpié la tranquera,
y rascándose la pera,
me dijo: Gaucho atrevido
ya he visto como has subido,
en una nube matrera.

“Debía mandarte al infierno,
por bandido y cachafaz.”
-Yo le respondí ahí nomás:
Cuando me oiga el Padre Eterno,
y con acento más tierno
le dije: “Hágame el favor
dejeme dentrar señor,
que con la guitarra mía,
quiero un rato de alegría,
darle a Dios, como cantor.”

Me hizo pasar. En un trono
estaba el viejo querido.
Dijo al verme: “Bienvenido,
seas cantor. Te perdono,
y siguiendo el mesmo tono
ande la bondá se encierra
me jué hablando de la guerra,
hecha por las ambiciones
y que andaba a trompezones,
pa’ poner paz en la tierra.

“Cantá -me dijo- cantá,
ya que hasta el cielo has llegao
que para hacerlo, te he dao,
talento y habilidá,
y jué tal la claridá
de mi voz en el relato,
que después de oirme un rato
dijo el viejito sereno:
Te has portao, como muy güeno
pero aura, tocame un gato.

Y cuando en un bordoneo
el cordaje retozaba
a Tata Dios le asomaba
las ganas de un zapateo,
y ya cumplido el deseo,
me dijo: “No he de negar
que me has hecho entusiasmar
con ese gato punteao
y solo porque es pecao
no me puse a zapatear.”

Me dio en el lomo un soplido
y me nacieron alitas
que eran blancas livianitas
y de plumaje pulido.
“Bajá áura, como has subido,
me dijo, si ese es tu empeño,
y pa’ todos me dio el dueño
del mundo la bendición...
Corto aquí la relación
que no ha sido más que un sueño.

martes, 23 de agosto de 2011

Date cuenta

No te estás dando cuenta y los estímulos están pasando como luces. Sí, escuchando sonidos mientras trabajas. Me he dado cuenta de que hay formas y formas de sentir. Sombras y formas de leer, te digo. -Recién he comenzado a analizar mis pensamientos y mis obras, pensando detenidamente cómo es que he procesado los datos de mi estudio y de mi vivir, de mis vivencias-.
He llegado a la conclusión de que hiperactivamente hablando puedes prestar atención a muchas cosas, y siendo más activo presentas conductas mucho más enriquecedoras y beneficiosas para tu entorno además de ti. Considerando así, que el medio es una obra de teatro compleja, llena de estímulos y posibilidades, sabiendo que esto en lo que vivimos, en lo que respiramos es prácticamente raro y real. Se sabe que es especial. Es físico y particular, atómicamente hablando. Y desde todas las perspectivas creo que es y no es, al igual que un estímulo puede y no puede afectarte. Ahora, -digo yo- piensa en donde estas sentado escribiendo, piensa qué estás haciendo ahora, ¿eres activo?, ¿estas aprovechando el momento?, ¿tienes las posibilidades de actuar? ¿Y si no las tienes? ¿Actuarás? Pregunta; ¿cómo te llamas?

No lo sé, pero sólo actúa para experimentar algo distinto, para darte cuenta de que también puedes ser otra cosa distinta, y conocer otras realidades que están ahí, pero como tú no actúas, no las veras jamás. Actúa compañero o dama, sinceramente te digo a ti, que esto que estoy escribiendo no es nada más que palabras reales y que comprobé recién, si no me crees intenta. ¿Uva?, ¿fuego? ¿Qué eliges?

Ahora, quizás estás ahí y posiblemente no estás haciendo nada más que escuchar, sin hacer nada productivo, entonces me digo a mi mismo: ¿por qué? Si el mundo es así y es tan complejo y tiene tantas cosas malas y buenas, de las cuales puedes aprender y conocer, entonces ¿por qué uno se queda sentado esperando a que todo pase, siendo que si no te mueves casi nada bueno ocurrirá?. Vive el presente, el pasado ya ocurrió, -lamentablemente-. Si pudiera -dijera el flautista- revivir como en las obras de teatros aquellos momentos, sería un mago, pero lamentablemente la magia está en el truco, y el truco está en la labilidad de la habilidad, en el presente. Es por eso que aquellos momentos del atrás, se recuerdan y también (desgraciadamente además de afortunadamente) se olvidan.

Excluyendo posibilidades y pensando que no te va a ocurrir, o que no lo vas a tener, o que no te resultará, creo entras en una especie de duda muy avarienta que te mantiene pasivo totalmente y cierra tu emoción. Te cierras, porque te obstruyes totalmente. Es como cuando una puerta se cierra, eso es, se cierra ante tus ojos, porque te demoraste mucho, porque el tiempo pasa, y nos vamos poniendo viejos, porque el tiempo recorre la vida como un segundero nada en un reloj, así como respiras. Si llegas a escuchar esta respiración sabrás que estas envejeciendo como un arbolito de esos que están ahí al frente y que no se mueven. Sabrás que estás ahí, que el tiempo está pasando y que en realidad no se está aprovechando, estás solamente viviendo (pesimistamente), y no te están ocurriendo cosas a la mano, muchas de las cuales no puedes alcanzar con tu brazo, que no se mueve porque está pegado a tu tronco y necesitas una rama para alcanzar la manzana. Este tronco que no se mueve (que te digo que no se mueve), esa ropa que no usas, esta rama, que puedes tomar y puedes dejar, sin darte cuenta, puede ser lo más bello en un solo momento.

Pueden ocurrir cosas impresionantes, te digo a ti, a cualquier persona que escuche esto, que le llegue, que le guste, que no le guste, etc. Es lo que pienso en este momento, en que vuelan mis pensamientos. Y reitero, que el ser tiene que ser. Redundantemente. Me refiero a que el ser tiene que estar activo, el ser no puede ser algo tan aburrido que no te das cuenta de lo rápido que está pasando tu vida, y de que no estás haciendo nada y te estas quedando ahí botado, atrasado en la temporalidad maldita. esa especie de enfermedad que nos pilla a todos por igual algunas veces, -lo digo por experiencia propia y por conocedor de esto-, lo digo, por distraído.

Por otro lado también es bueno ser pasivo, -creo- pero sólo hasta un punto, ya que siendo así puedes escuchar a las personas por horas hablando, puedes estar tranquilo y puedes no estresarte por nada, puedes simplemente hacer como que respiras en un mundo en que las cosas pasan día a día, en el que tu ahí estas sentado respirando, como siempre, sentado, ahí, pasivo.

Ahora me planteé: ¿será posible esto? ¿Será posible hacer una obra grande, en donde escribas parte de todos los pensamientos que han rasgado tu mente y recorrido toda tu cabeza? ¿Será posible plasmar todo eso o parte de eso, se podrá hacer algo tan grande?
Ahora digo, si lógicamente se puede, o cuesta ¿que es lo que nos entorpece? ¿es el pesimismo? ¿es la tranquilidad que hace crecer a las plantas? ¿Es el agua que recorre los ríos sin un caudal? ¿Es el piano que se estrella con mi oído? ¿Eres tú? ¿Realmente es posible?

Creo que sí, pero esto cuesta un poquito. Ahora tengo que filtrarlo, tengo que pensar con sabiduría. Ahora, siempre sé tú, como dicen por ahí. Es lo que yo escribo ahora, es lo que mi mente piensa. La mente piensa y miente mucho. Se experimenta demasiado, pero ¿cuánto de eso es lo que expresamos y cuánto de eso es lo que vives? ¿y cuánto de eso es lo que dejas para los demás? ¿Cuánto de eso es lo que te gusta? ¿Y cuánto de eso aprovechas?

Hazte estas preguntas, y veras que tú eres exclusivo, como la verde alameda que inspira. Pensarás que es una aberración tanta belleza junta. Otras veces, pensarás que esto es muy positivo, que esto no es el mundo, que el mundo es complejo, que es una diversidad de un todo, es una multiplicidad de especies y de todas las cosas imaginables. Digo, puedes sacar tanto de una situación pequeña, puedes escribir tanto con sólo un dolor de cabeza, puedes escribir tanto con sólo un beso, puedes gritar expresando todo lo que crees, puedes llorar y puedes sabotear lo que sea, puedes, tú.

Yo sé que lo consigo, y que a veces es mejor que no sea a veces. Que es mejor que sea siempre, porque siempre, puede relacionarse con el ahora, y si es siempre lo haces varias veces. Estás planteando tu cotidianeidad, estás recurriendo a tu habitualidad, estás aprendiendo, -creo- porque sólo el tontito dice que todo lo que habla es correcto, lo digo porque no todo es. Algunas cosas sólo son, sólo respiran, nada más.

Como tú. Como un árbol estancado, que crece y crece pero no se mueve. Como un felino, que recorre direcciones nuevas y atraviesa pampas con audaz suavidad. Como así, justamente pasan a mi lado personas que son distintas, o muy parecidas a mí, son reales, y respiran, ellos son en esta tómbola. Unos arbolitos y viejos verdes, unos mosquitos molestosos, otras veces aves rapaces no sagaces, unas sagaces, pero torpes, unas veces gorriones, otras tiburones tiernos.

domingo, 21 de agosto de 2011

Codificación

¿Y si viviésemos en una realidad convencional sin ropa, sin abrigo, y el clima fuese tremendamente cálido y sofocante? ¿Y si nuestras necesidades fuesen satisfechas automáticamente por el cuerpo humano constantemente? ¿Y si no tuviésemos la necesidad de hablar para manifestar nuestros pensamientos? ¿Y si pudiésemos traspasar ideas con sólo mirar? ¿Y si no tuviéramos que necesitar el sistema digestivo, porque no tenemos la necesidad de comer? ¿Y si nuestra necesidad primaria fuera aprender? ¿Y si nuestra sociedad fuese muda? ¿Y si nuestro arte fuese no existir? ¿Y si a diario descubrieses cosas que no puedes callar? ¿Y si conocieses lo que al comunicar, nunca nadie lo entendería? ¿Y si al comunicar lo desconocido, el conocimiento de lo comunicado fuese indecodificable? ¿Y si viviésemos sólo un día y en la noche estuviésemos muertos? ¿Y si nuestra misión fuese escuchar sin interrumpir? ¿Y si para callar tienes que cesar? ¿Y si mueres a diario, y no una vez? ¿Y si nunca nadie murió? ¿Y si llegases a tener todo el conocimiento del universo, pero no lo puedes comunicar porque nadie lo entiende? ¿Y si tu habilidad inmensa fuese hacer incomprensible las cosas? ¿Y si la imagen fuese lenguaje? ¿Y si te obligasen a entender? ¿Y si te obligasen a aprender y no puedes? ¿Y si un grupo de ideas psíquicas manifiestas fuesen sólo una cruel mentira? ¿Y si lo desconocido es mentira? ¿Y si el tiempo se detiene? ¿Y si la convención fuese ayudar? ¿Y si sólo pudieses escuchar, pero no expresarte? ¿Y si evolucionáramos a crear nuevas habilidades? ¿Y si retrocederíamos? ¿Y si nuestra diversión fuese revivir actividades que ya no puedes llevar a cabo? ¿Y si el mar fuese el mundo, y la tierra el cielo? ¿Y si el aire fuese tierra, y el agua piedra?

viernes, 29 de julio de 2011

Multillama

Entre tus sonidos, está ese atemporal recuerdo,
a través de la rama,
del arrayán más lleno de hijos.
Desbaratados e invertidos.
Siento el olor.
Siento el calor.
De una llama que se mueve, con orejas blancas.
Estoy escuchando la brisa,
que rompe mis oídos rojos de risa.
Algo ocurrió, por ahí.
En medio de las ramas.
Pasando por la verde figura de la vida.
Esa frondosa memoria que despega tu imaginación.
Dulce colmillo.
Del estepario, olvidado en el ayer,
por el presente del mañana.
Prefiero un bosque lleno de resistencias,
ante un campo elíseo de cinismo.
Allí, entre los tulipanes de la causalidad.
Comiendo de la mano.
Como un caníbal desesperado.
Hecho ajenjo y tienes sed.
Cabalgando sobre las nubes,
y al mas torpe corcoveo del bagual patagónico.
Atendido por el olor del cuero circundante,
sacudido de los hombros, por la furia del blanco.
Montado por el bigotudo torpe.
Hecho trizas en el aire, entre medio de estas llamas.
Móviles, como la cola de gavilán.
Agitada, como cuando te dicen falleció.
Sobre las rocas de las lágrimas,
está la llama que crea el fuego de la inspiración.
Sobre el sentimiento alegre y tras la llena
rabia de agarrarse el cabello.
He ahí el momento, si pudiera detenerlo.
Si pudiéramos,
¿Podrías?

sábado, 7 de mayo de 2011

la gama de dolores

¿Y por qué dice el sabio, cuando todo lo pregunta?
Sagaz paz que truenas a través de los mares, te escondes como una lombriz en la tierra, corres como un auto, al tanto de tu muerte.
A ti te digo, ¡flojera de porquería!, que te alojas dentro de mis pensamientos. Refúgiate en mis brazos, apoya tu cabeza, que por mientras sueño.
Algo así como un trabalenguas traba mi ventana, como una lengua de perro buscando su cola, como una dama desencarnada, sintiendo su brazo largo y aburrido mientras ésta estalla.
Este es uno de los fomes no tan buenos, es uno de los buenos no tan malos, es uno igual. Se une con unas cuantas palabras mientras estornudo. Se une la tierra con el cemento, como el nervio con un tartamudo. Terminé, hasta medio lento he dicho. Nos vemos en un nicho, he dicho raro bicho.

miércoles, 27 de abril de 2011

Rotas notas sordas

Mira, las liras de tu rima arcaica hacen chispa tu volar, -o tus cuerdas de esos cantos son vastos intentos de lo que no encontrarás-. Escucha, tu movimiento espuma mis palabras. Encendió mi pupila, traspasó el universo, evocó una risa sigilosa, incendió mi prosa.
Corre. Tu pavorosa voz, me decía sí, y tu torbellino me hacía circular con una fuerza de sansón. Claro, me sacudí en el agua porque era un remolino de sagaz fluctuación, ratificado legalmente por tu ira -estúpida traición-. Pasaron meses de miradas, años, días y el dueño de tu sueño se hizo realidad.
Ser aberrante ¿qué ahora tienes para mí? ¿Qué tienes ahora para la hora inexacta? ¿Sacudes tus segunderos, como un lindo perrito obsesivo? ¿Escupes veneno, como la larga demanda de piel que hiberna día tras día?
Hora tras hora. "Pasan los segundos" -dijera cronos-, día a día duerme tu bebé, balbuceando incoherencias, el dueño de tus sueños.
¿Estás contento ahora, tras tu necia pulsión? ¿Comiste de la palmilla? ¿Tragaste de tu llama, vela en velas? ¿Te diste cuenta de tu pasividad?
Lo averiguo, mientras camino entonces. Mejor digo que es sólo un poco más andar a dos por hora, que estar en el andar sin saber tu velocidad. Suele ser más compatible conmigo un hola flotante en el mar, (en una botellita) que un dudoso caballito de mar, en el estar.
Encontré la botellita -me dijo el caramelo-, que le dijo al vago, que le dijo al perro, que le dijo al gato, que le dijo al tejo. Me dijo "ahí te alcanzo" -la tortuga-, el elemental símbolo de quietud. Me dijo un pajarito que el flautista de antaño se había perdido junto con las aves de los árboles milenarios. El pobre se fue corriendo como un niño tras su pelota. Recorrió las rocas a través del bosque en su triciclo, ¡que risa este sonido, este relato, estoy volviendo al bosque! ¡Qué bueno este sonido, oigo mis notas sordas, soy el flautista!
Ahora respiro esta brisa de notas, sabiendo que lo que se aproxima será complejo, pero digno de aprendizaje. Aprendí a sentir que estoy en el bosque de nuevo. Me duele, me pican unos bichitos, ¡que odiosos los mosquitos! ¡El tero me dicta que sí estoy con estos bellos y hermosos pájaros!, ¡volví!, ¡aquí estoy!, ¡es verdad!
Sentado al lado de un pájaro carpintero que taladra mis imágenes y que al mismo tiempo hace sordo mi tocar, rompe mi oído izquierdo. Sigo haciendo esto, sigo creando.
¿Tanto puede hacer una simple ave?
Si la miras con lupa y reflexionas; claro. Un animal retrata tus actos y hasta los más primitivos e incompletos de justificación.
¿Tan simple es?
Así es, diría el señor águila. Con lentes de por medio y al instante.
Yo no soy ave, pero vuelo igual. Si no puedo volar salto, pero vuelo igual.
Creo hay un fin detrás de una situación, como un olor tras el aserrín. Hasta la pregunta más estúpida y fácil la puedo hacer, así como la más difícil, pero te puedo responder el momento, un intento. Porque las respuestas son nada más que eso; intentos.
¿Y el momento? El momento es único, es para ti. Es tuyo, y lo puedes obsequiar, lo puedes recibir. Lo puedes acariciar, los puedes interpretar, lo puedes hacer, lo puedes pensar, lo puedes postergar, lo puedes perder y lo puedes aprovechar.
Lo puedes matar, lo puedes disfrutar, lo puedes relatar, lo puedes destruir, lo puedes crear, cambiar y sonar. Eso es lo suave de la música, de la escritura, del momento, es arte amable, y a veces no tan amable, que te hace tocar el fuego y todos los fuegos. Esto como todo es vida, vida que se olvida y vida que motiva.

jueves, 24 de marzo de 2011

¿Con quién tengo el gusto?

Hoy y ayer llovió fuerte, mi rabia hizo sacudir el mar. Dijo Poseidón. Leía yo. Comía nuez y reposaba mi trasero en una especie de cama grande, además leía a un vago, pero sagaz cantor. Más específicamente el siguiente fragmento; "Se tocará la puerta de la impresión y la atención ¿Quién responderá al frontis, el que quiere contestar o el que no lo quiere así?". Escuche unos tacos muy fuertes sonando hacia mi puerta. Mi tía llega a mi casa. Tocan la puerta, ¿quién es? Minerva, dice entonada. Relacioné tacos rápidos, y sonido agresivo hacia el superior de la puerta. Dije es ella. Por supuesto, abrí la puerta.
Escucho: ¡¡¡Hijo!!! ¡No sabes lo que sucedió!
-Pensé la hiedra se secó. ¿Con esta lluvia?
Me decía que este no era el momento ni la situación adecuada para decirme la noticia (luego de mirarme con nerviosismo patológico). Le dije no escondas nada. Ella pronuncia: tu tío murió.
-No, no. ¡NO! No puede ser verdad, mi tío es como un arrayán. Esto es mentira dije yo, no puede ser. (Luego de una mirada fría, apática más bien)
Caí al suelo de rodillas, como un caballero de piel rosada, ante el rey comunicador.
Momentos más tarde, la nieve hecha piedras voló hacia mis oídos y frente. Antes de que me dé cuenta de que todo era verdad la dama desencarnada me abraza, ahí en la nieve gris. Sí, en el piso de mi hogar.
Mis lágrimas se adueñaban de su cabello bello como Helena, mientras me frotaba la espalda muy fuerte. Entendí que el tiempo no volvería atrás jamás. Ahora sería en parte un dibujo, un vago recuerdo, el té con mi tío, lo más simple.
Anda a dormir mientras te preparo una hierba me decía ella, le respondí: No quiero más hierbas, ni hiedras. Yo pensaba cómo iba a poder dormir, cómo comería, como respiraría luego del rayo de Zeus. Además de estar atrapado en un corral con crudos caballos como rayos y el feo Morfeo.
Me llegó al hueso, como esas puntadas dentro de ti, luego de un vaso refrescante con alfileres rojos. Tan filoso como un cuchillo, me punzó el corazón, ella. La vívida, muerta y real noticia infame.
No me di cuenta, y me quedé dormido encima de mi escritorio, con la cabeza encima de mi brazo derecho. Al otro día, claro, cuando me desperté tenía a un débil y doloroso amigo que sostenía mi cabeza. También el brazo dormidísimo.
Dije esto no puede ser, por enésima vez. Me comuniqué con él, al instante. Cronos se aparece en dos movimientos, pasa el caballero tiempo. Contesta la agonía, acompañada de la tristeza, cubierta de una piel dicen rosada ¿Con quién tengo el gusto? ¿Con el placer?
-No, con el miedo, el dueño de tu sueño.

Caminante ...

Caminante: Como estamos chicuelo.
Cantinero: buenas tardes en mi tierra estimado. ¿Cómo lo ha tratado la vida?
El camello: Bien, con sed de grito. ¿Cómo se encuentra amigo espadachín?
Cascabel: Mejor que tú, a la perfección. Quisiera saber por qué espadachín, querido caballero?
Caminante: Por su asertiva bífida, don dueño de tu espada
Cascabel: ¡Gracias por el elogio don Goliat!
Goliat: ¿Cómo está tu vida oh espadachín?
Cascabel: Sáqueme a bailar primero, tomamos un vaso de vino y seguimos hablando mejor será!
Caminante: Con mucho placer. Por favor deme un buen vino.
Cascabel: A su orden querido magnánimo, pero usted aún no me ha dicho su nombre y ya me está pidiendo alcohol. Quien se cree que es, el rey de roma?
El oasis: Yo solo estoy pasando por acá, y quiero tranquilidad.
La tormenta: Usted camina 10 pasos, llega a mí con su arrogancia y me pide sangre de la buena, ¿quién se cree que es don caminante, cuál es tu bendito nombre?
El emperador: César.
Cascabel: ya veo.
Cesar: ¿Cómo te llamas espadachín certero?
Espadachín: David.
Cesar: Lo supuse, ¿Sois ciego?
David: Veo hasta los osos, soy orgulloso y cuando me tocan la garganta toso.
Cesar: ¿Y a los osos grandes los ves?
El ciego: Los veo pero no les creo
Cesar: Debieras, tienen tal poder que en dos segundos te desgarrarían el orgullo de tal forma, que no te quedaría aire para toser, no podrías ver a través de tus ojos debido a la pérdida de estos, no podrías caminar al unísono sin una pierna, no podrías escuchar, porque te arrancaría la oreja mientras tu orgullo, tu falta de respeto, tu contumacia y tu sonrisa se aleja.
David: Perdón don, no quise ofender, mis intenciones son verdades duras, puras y de reverencia.
Cesar: Más te vale espadachín. Me gusta tu estilo, te nombro esclavo de tus palabras y dueño y señor de tus pensamientos. Ten cuidado que las palabras que vuelan de tu boca no son almohadas, recuerda que no siempre existirán peones para que acepten tus violentos vocablos, mira a tu alrededor, maneja tus ideas y empléalas con quietud y sabiduría, que el verso equívoco es de fácil vuelo, simple trote y voraz caída.
David: Lo tendré en cuenta, gracias por su sabia labia, querido caballero. La próxima vez beberá todo el vino que desee y preguntará lo que usted convenga.
Cesar: Así es estimado, aprendes rápido, como un claro espadachín. Adiós estimado
Estimado: Adiós, éxito en sus pasos.
El pensamiento: ¡Maldito ego!